miércoles, 20 de mayo de 2015

Las virtudes y los mandamientos

                                              LAS VIRTUDES

La virtud es una disposición habitual y firme para hacer el bien. Hay virtudes humanas y virtudes teologales.

virtudes humanas
Las virtudes humanas son perfecciones habituales y estables del entendimiento y de la voluntad, que regulan nuestros actos, ordenan nuestras pasiones y guían nuestra conducta en conformidad con la razón y la fe.

Las principales virtudes humanas son:

La prudencia: Dispone la razón a discernir en           cada                circunstancia, nuestro verdadero bien y a elegir los                          medios adecuados para realizarlo.

La Justicia: Consiste en la constante y firme voluntad de                dar  a los demás lo que les es debido

La fortaleza: Asegura la firmeza en las dificultades y la                   constancia en la búsqueda del bien, llegando incluso a la               capacidad de aceptar el eventual sacrificio de la propia vida          por una causa justa.

La templanza: Modera la atracción de los placeres, asegura         el dominio de la voluntad sobre los instintos y procura el               equilibrio en el uso de los bienes creados.


virtudes teologales
Las virtudes teologales son las que tienen como origen, motivo y objeto inmediato a Dios mismo. Infusas en el hombre con la gracia santificante, nos hacen capaces de vivir en relación con la Santísima Trinidad, y fundamentan y animan la acción moral del cristiano, vivificando las virtudes humanas.

Las principales Virtudes teologales son:

La fe: Es la virtud teologal por la que creemos en Dios y en            todo lo que Él nos ha revelado, y que la Iglesia nos propone            creer, dado que Dios es la Verdad misma.

La esperanza: Es la virtud teologal por la que deseamos y              esperamos de Dios la vida eterna como nuestra felicidad

La caridad: Es la virtud teologal por la cual amamos a Dios        sobre todas las cosas y a nuestro prójimo como a nosotros              mismos por amor a Dios.






                                LOS MANDAMIENTOS 


Los Diez mandamientos, también conocidos como el Decálogo, son un conjunto de principios éticos y de                       adoración, que juegan un papel importante en el Judaísmo y         el Cristianismo


1)AMARÁS A DIOS SOBRE TODAS LAS COSAS. 
             Esto quiere decir que Dios debe ser lo màs importante en tu vida. Hay que                       amarlo, respetarlo, vivir cerca de El con la oraciòn y sobre todo ¨cumplir su                     voluntad¨ en tu vida, o sea hacer lo que El te pida.
         
         2) NO JURARÁS EL NOMBRE DE DIOS EN VANO.
             Este mandamiento manda respetar el NOMBRE DE DIOS y respetar tambièn                    todas las COSAS SAGRADAS (como por ejemplo la Iglesia y lo que hay y lo que              hay en ella, los sacerdotes...).
        
         3) SANTIFICARÁS LAS FIESTAS 
              Esto significa que debes dedicar a Dios el dìa DOMINGO y los dìas de fiesta de               la Iglesia.

         4) HONRARÁS A TU PADRE Y A TU MADRE
             Esto quiere decir que debes AMAR a tus padres, porque Dios te los ha dado,  y SER AGRADECIDO con ellos porque les debes la vida y la educaciòn.   

         5) NO MATARÁS
             Nadie tiene derecho, por ningún motivo, a quitar la vida a otro. Sòlo Dios es quien da y quita la vida.

         6) NO COMETERÁS ACTOS IMPUROS
             Los hombres debemos aprender a dominar nuestras                              pasiones, debemos respetar nuestra sexualidad. Esto                              significa la CASTIDAD.

        7) NO ROBARÁS
           Que nadie debe tomar lo que no es suyo, aunque se le antoje mucho, aunque el  otro no se vaya a dar cuenta de que algo le falta.

        8) NO MENTIRÁS 
            Esto quiere decir que debemos decir siempre la verdad a los demàs. Mentir es decir algo falso, es engañar. La mentira nos hace sentir culpables y nos mete                en muchos enredos.

        9) NO CONSENTIRÁS PENSAMIENTOS NI DESEOS IMPUROS
            Este mandamiento nos dice que no debemos pensar ni desear cosas    inmorales. Si un pensamiento asì llega a tu mente, debes desecharlo de   inmediato.

      10) NO CODICIARÁS LOS BIENES AJENOS
             Significa que no debes desear tener lo que otros tienen, no ser envidioso.